martes, 11 de marzo de 2008

Um fado com você

Fue al abrazar tu cintura que todo entendí. Tu piel me anunciaba el frío sin ti. Volteaba, buscaba, andaba, soñaba. Pero no te vi.
Un fado en la orilla del río y un tinto en la noche brumosa, de nuevo me hicieron volver a morir junto a ti.

8 comentarios:

Don Mike dijo...

ombien por el blog, esta interesante y buena propuesta de ideas y naraciones.saludos y volvere para leer con mas calma.

Hela Freyja dijo...

Yo he muerto taantaaas veces en su ausencia y en su presencia... Es repetir el dolor de la pérdida nuevamente.

Un saludo.

mArXelLa dijo...

En la lejanía, en las noches frías y en los días nevados uno se da cuenta de que es lo vital, lo justo y lo necesario. A veces una mirada, a veces una palabra, a veces un mensaje, a veces sólo la presencia más cerca, a veces tú voz a lo lejos y pronto un abrazo y un beso.

Unknown dijo...

Excelente!

El R dijo...

Hola Don Mike. Eres bienvenido las veces que quieras. Gracias por pasar y dedicar un tiempo

El R dijo...

Hela qué gusto verte y leerte. Pues sí, el riesgo de la vida es la constante presencia de las muchas muertes iterativas. Qué le va a hacer uno. Un saludo para tí de retache y gracias por venir de nuevo.

El R dijo...

Querida Marxella, descubrir en el amor lo vital si. Eso si puede. Lo justo y lo necesario, no lo sé. A veces se quiere todo, a veces no tiene uno nada. Un beso y un abrazo, ah. A veces eso es suficiente para volver siempre.
Besos

El R dijo...

M.N. Gracias por venir de nuevo. Eres un benevolente. Gran blog el tuyo, verdad. Es de envidia.

Saludos y gracias por leer